No podemos controlar quién nos trae al mundo. No podemos influir en la fluidez con que nos educan. No podemos obligar a la cultura a volverse instantáneamente hospitalaria. Pero las buenas noticias son que, aún después de ser heridos, aún en un estado fetal, aún incluso en un estado hasta el momento de captura, podemos recuperar nuestras vidas.
estic flipant amb el llibre gloria!!es llarguet, però aviat te´l paso ;P
ResponEliminaL'ESPERO AMB CANDELETES ;)
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